| ¿Todavía hay lugar ? |
- Yayo Uribe
- 4 ago 2019
- 1 Min. de lectura
Actualizado: 26 ago 2019
Los comediantes, impulsados por su Ego comenzaron poco a poco a ser consumidos por algo aun más grande. El tiempo. Más específicamente el tiempo de espera para llegar a anotarse a la lista del Open Mic.
Que si bien era sabido, abría su pluma para comenzar a anotar gente a las 9:00 P.M . La conglomeración de los adictos a la jocosidad y el dolor ajeno se hacía notar desde las 6:00 P.M. Solo para tener 5 Minutos arriba del escenario por ahí de las 11:20 de la noche (Si te iba bien). Nadie quería el publico de las 12:30 AM y debias llegar al rededor de las 6:20 para quizás ser uno de los 5 primeros en subir al escenario.
Semanas transcurrieron y entre debates, piropos homoeróticos, cervezas y cigarros forzados finalmente llegó el nuevo mecanismo de trabajo.
Había dos Opens, Martes y Jueves. La lista de los martes rara vez se llenaba por lo que se consideró a los participantes de dicho open comprometidos con la escena y su ego. Habría una rifa todos los jueves a las 9:00 en La Caja Popular donde los primeros en ser sorteados serían 3 lugares entre los egoistas comprometidos del Open el Collegue. 3 más para foráneos, 8 de todos los comediantes presentes y uno más por 'Dedazo'.
Así, los 15 lugares estarían llenos, se subiese quien se subiese







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